Corrientes es la cuarta provincia más pobre del país
La pobreza creció en 1,4 millones de personas en el último semestre y 1,15 millones de personas en el último año.

La línea de indigencia se mide por el costo de la canasta básica alimentaria, por lo que la inflación de alimentos resulta una variable determinante. En ese sentido, los precios de la canasta básica alimentaria se aceleraron en la segunda parte del año pasado, lo que se combinó con una fuerte caída real de los ingresos del sector informal de la economía. Los salarios no registrados avanzaron apenas 65 % durante todo 2022, 30 puntos por debajo de la inflación.
El avance del IPC a partir de julio de 2022, que recién se estabilizó en 5 % durante el último bimestre del año, contribuye a que también haya aumentado la proporción de la población que no logra cubrir la canasta de bienes y servicios básicos. En la segunda mitad de 2022, la inflación fue de 7,4 % en julio; 7 % en agosto; 6,2 % en septiembre; 6,3 % en octubre; 4,9 % en noviembre y 5,1 % en diciembre.
En el caso de la ciudad de Corrientes, finalizó el 2022 siendo el cuarto aglomerado urbano más pobre del país, con el 45,2 % de su población bajo la línea de pobreza y 9,4 % en la indigencia. Así lo marcó la última medición del Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec).
Esto significa un pronunciado aumento con respecto a la medición del primer semestre del 2022. En ese momento, la pobreza era de 38,5 %, alcanzando 148.675 personas; y la indigencia de 7,6 %, unos 29.188 correntinos.
En el segundo semestre del año pasado, el 36,1 % de los hogares de Corrientes eran pobres, unas 175.055 personas
Mientras que el 7,1 % de los hogares eran indigentes, el equivalente a 36.473 correntinos.
El aumento en Corrientes tuvo su correlato en todo el país. A nivel nacional, la pobreza subió del 36,5 % al 39,2 % de la población. Mientras que la indigencia tuvo una leve merma, y pasó de 8,8 % del primer semestre a 8,1 % del segundo semestre del 2022.