Fue en Goya y se logró a través de un juicio abreviado pleno. La pena es de ejecución condicional. La sanción de esta conducta es un recordatorio de la prohibición que rige en todo el territorio provincial de iniciar quemas.
En la siesta del 12 de enero del 2022, Damián de Jesús Moringa, conocido como “Taco”, amontonó basura en una cuneta frente a su casa, ubicada en Ruta Nacional n.° 12, kilómetro 832,5, en la Primera Sección Batel, Departamento de Goya, y le prendió fuego. Pésima idea. No solo por la sequía que azotaba la provincia en ese momento, sino por las condiciones climáticas de ese día y por no haber adoptado ningún recaudo para evitarlas. Un fuerte viento soplaba del Este y lo más seguro era que las llamas se propagarían. Y así fue. Esa imprudencia afectó aproximadamente ocho hectáreas de forestación de eucalipto del establecimiento “La Guaraní”, y luego se extendió a los establecimientos “Kamerich”, “Brambilla”, “Carolina” y “La Pelada”, todos ubicados al Oeste de su propiedad, generando daños a un total de aproximadamente 240 hectáreas de plantaciones de eucaliptos, 100 hectáreas de pastizales, alambrados, malezas, árboles autóctonos y postes de tendido eléctrico.
Ese hecho, calificado como incendio culposo (art. 189, primer párrafo del Código Penal), le costó a “Taco” Moringa una condena como autor material, tras un juicio abreviado pleno gestionado a instancias del fiscal de la causa, doctor Juan Carlos Castillo (Unidad Fiscal de Investigaciones Concretas, UFIC de Goya), en acuerdo con el defensor oficial penal, doctor Joaquín J. Sebastián Romero (Unidad de Defensores Oficiales, UDEFO de Goya), que asistió al acusado. La pena: seis meses de prisión de ejecución condicional, al no tener antecedentes.
